Plaza Micaela Bastidas

Hola:

Si,  la Plaza se llama "Micaela Bastidas".

En realidad la foto la saqué de internet, ya que no alcancé a fotografiarla. La ví el día que hice el recorrido turístico, en el Bus de 2 pisos. Me quedé sorprendida por el nombre, puesto que me era totalmente desconocido.

Cuando llegué a casa me fijé en la enciclopedia, pero la de papel,  no la digital, la que se usaba antes,  recuerdan? Es que aún me gusta sentir en los dedos el roce del papel y no es que descarte el teclado. Me pasa como en la famosa película "Las alas del deseo" (Alemana de Bruno Ganz).  Eran dos ángeles que recorrían la ciudad (Berlin) y querían parecer humanos y uno de ellos añoraba el  placer de leer el diario y rozar el papel y que le manchara los dedos. Esa acción lo acercaría más a "ser humano" ¿Alguién la vio? Es una película vieja,  en blanco y negro, pero preciosa!!!

Bien, fui a la enciclopedia y Micaela Bastidas, no figuraba; me fijé en otra y tampoco. No tuve más remedio que ir al teclado y recurrir a  "San Google". Copio exactamente lo que decía,  que es terrible:

 

Micaela nació en Pampamarca (Abancay) en 1747. Hija de Manuel Bastidas, descendiente de africanos, y de Josefa Puyucahua, la joven Micaela era de esbelta belleza y tez bronceada, con el cabello ondulado, por sus raíces en parte,  africanas. Lo que más resaltan los historiadores e investigadores, sin embargo, no son sus rasgos físicos, sino ese temperamento férreo que marcó su derrotero.

Se casó muy joven en 1760, a los 15 años con José Gabriel Condorcanqui, Túpac Amaru II, uno de los próceres de la historia del Perú.

Madre de tres varones, Hipólito (1761), el primogénito, Mariano (1762) y Fernando (1768), Micaela Bastidas tuvo como primer maestro ideológico al propio esposol, quien había adquirido una sobresaliente formación, tanto en el [Cusco] como en (Lima).

Fue capturada luego del fracaso de la sublevación, Micaela Bastidas fue ejecutada, sus verdugos le cortaron la lengua, le anudaron al cuello una cuerda que tiraron desde lados opuestos y, mientras agonizaba, la patearon en el vientre y en el pecho, en la Plaza de Armas del Cusco, el 18 de mayo de 1781, a los 36 años de edad, habiendo tenido antes que presenciar la ejecución de su hijo Hipólito y a la vista de su esposo.

 

Ang.