martes, 8 de mayo de 2012

Cuidado al recordar a los amigos de la infancia . . .

Esto es para las chicas del blog.


Qué lo parió...

¿No les ha pasado alguna vez que miran a otra persona de su misma edad y piensan: "yo no puedo parecer tan vieja"...?

Mi nombre es Alicia y estaba sentada en la sala de espera del dentista para mi primera consulta con él. En la pared estaba colgado su diploma, con su nombre completo.
De repente, recordé a un muchacho alto, buen mozo, pelo negro, que tenía el mismo nombre, y que estaba en mi clase del secundario, como 30 años atrás. ¿Podría ser el mismo chico del cual yo estaba secretamente enamorada?
Pero después de verlo en el consultorio, rápidamente deseché esos pensamientos. Era un hombre pelado, canoso, gordo, y su cara estaba llena de arrugas, y lucía muy viejo como para haber sido mi compañero de clase.
Después que examinó mis dientes, le pregunté si había asistido al Secundario Issac Newton.
- "¡¡¡Sí , Sí!!!" Sonrió con orgullo y entonces le pregunté:
- "¿Cuando te graduaste?"
- "En 1975. ¿Por qué me lo preguntas?"
- "¡Vos estabas en mi clase!"
El me miró detenidamente...

Y ENTONCES...

ESE FEO,

CALVO,

ARRUGADO,

GORDO,

CANOSO,

DECRÉPITO,

RECONTRAMIL HIJO DE PUTA, ME PREGUNTÓ:
"¿PROFESORA DE QUÉ ERAS?"


3 comentarios:

Trinjaus dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Antonio dijo...

Me parecía conocido. Pero pensé 2 cosas:

* si ya se había publicado seguramente nadie se iba a acordar.

* si las canciones que nos gustan las escuchamos muchas veces, por que no se puede hacer lo mismo con los cuentos?

Un abrazo.

Jorge Luchia dijo...

Vos sabes que, ante la repetición, los humoristas tienen una frase de cabecera "el público se renueva", aquí eso no pasa, pero el "alemán" se encarga de producir un efecto muy parecido ...
Don't worry, be happy

Un abrazo.
Jorge Luchia